21.4.10

De Viejo Nada


Viejo Isaías, una bodega que encontré casi por casualidad, un emprendimiento de gente jóven con ganas con experiencia en vinos y restaurantes.

Me llamó la atención lo cuidado del vino y su sabor inconfundible a madera, dirían los enólogos "aromas profundos, taninos suaves en boca, sabor a frutos rojos mezclados con madera, y un final largo, casi diríamos un vino redondo"



Es así muy buen color (rojo, obvio) fuerte pero no ácido, muy profundo el gusto a roble.

Cuentan los que conocen la historia que Isaías Hernandez, tenía tres pasiones, el vino que a juzgar por lo probado hacía muy bien, el cultivo de rosas, (que realizaba en su jardín) y su esposa, a quien le daba la primer rosa que crecía en el jardín como prueba de su amor que florecía nuevamente cada año.


Con estos antecedentes, los invito a probar Viejo Isaías Reserva, un malbec roble excelente, busquen al amor de su vida y brinden por todo lo que han vivido, pero sobre todo por lo que van a vivir.